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Ojo por ojo y la Ley de Restitución

Una errónea comprensión de una simple ley de restitución que ha prevalecido por milenios

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Introducción

Parashá Mishpatim presenta un número de instrucciones de justicia y soluciones para problemas cotidianos de cualquier sociedad. No obstante, estas instrucciones divinas han sido fatal y erróneamente interpretadas por milenios, causando un gran rechazo en general a los libros del Pentateuco, leyes de Dios o Antiguo Testamento en general. La historia de la mujer embarazada en Éxodo 21:22 enseña un sin fin de principios de justicia, amor y temor ante la vida, especialmente la que se gesta en el vientre, pero dado el objetivo de este estudio, abarcaremos específicamente el problema de la restitución, o como comúnmente se dice "la ley de ojo por ojo, diente por diente"

Leyes de Restitución

Las primeras instrucciones de la Torah, después de la entrega de "los diez mandamientos", lidian con problemas cotidianos que podríamos inferir que eran necesarios y una prioridad en el contexto de la historia de la estadía en el desierto. El primer tema a abarcar es la prohibición de la esclavitud, (algo que también se mal entiende) ya que sería lógico que los hebreos se sentirían tentados a subyugar a los egipcios u a otros esclavos que salieron con ellos, como una venganza​. También Dios instruye acerca de la violencia, robos, hurtos y continúa con el principio de restitución, este último como una consecuencia de ya haber cometido alguno de los actos anteriores. Por lo tanto, como base de la comprensión de esta instrucción bíblica, es fundamental entender que restitución no es en sí la perfecta voluntad de Dios, puesto que Dios no quiere que restituyas la prenda que le robaste a tu prójimo, o el buey que dañaste o que sufras la penalidad por asesinar a alguien, sino que, al contrario, lo que Dios quiere es que no hagas ninguna de las anteriores. Pero si fallas, aquí es donde se introduce el botón de reseteo,  "La restitución". Es decir, la restitución funciona solo como un "plan B", una forma de remediar y remendar estas situaciones no queridas por Dios.

יב  מַכֵּה אִישׁ וָמֵת, מוֹת יוּמָת 
יג  וַאֲשֶׁר לֹא צָדָה, וְהָאֱלֹהִים אִנָּה לְיָדוֹ--וְשַׂמְתִּי לְךָ מָקוֹם, אֲשֶׁר יָנוּס שָׁמָּה

Éxodo 21:12   El que hiriere a alguno, haciéndole así morir, él morirá. 13 Mas el que no pretendía herirlo, sino que Dios lo puso en sus manos, entonces yo te señalaré lugar al cual ha de huir.

La introducción a las leyes de penalidades es la prohibición de asesinar. El que mata morirá pero el que llega a causar la muerte a alguien sin tener intención de hacerlo, como una accidente, que suelen ocurrir, de acuerdo a la Torah es inocente y puede refugiarse en un lugar para que nadie le haga daño por venganza.

Esta instrucción debe servir como un antecedente de todas las instrucciones que proceden, ya que a través de ella se establecen los dos tipos de pecados y sus dos finalidades, el pecar con alevosía y el errar por ignorancia o sin tener una intención. El hombre que asesina a alguien, por ejemplo, debe entender que será juzgado con la pena capital,  pero si fue un accidente hay un "plan B" para refugiarse, y no será juzgado. De la misma forma sucede si alguien robó, hurtó o dañó alguna propiedad de su prójimo, es juzgado según la intención y motivos y su "plan B" o la forma de corregir el pecado es la restitución,  el retornar la prenda robada o los gastos correspondientes.

Antes de ir al tema principal de la Ley de Ojo por Ojo, observemos algunas leyes de restitución:

  1. Ex 21:26- Si alguien daña el ojo de sus siervo debe indemnizarlo concediéndole  libertad.

  2. Ex 21:27 Si alguien daña un diente del siervo debe indemnizarlo concediéndole  su libertad.

  3. Ex 21:28-28 Si la propiedad de alguien (como un buey) daña a alguien, se debe indemnizar con el buey, o si fuera consiente de que su buey podía causar daños debe pagar con la misma vida del propietario.

  4. Ex 21:32  Si el buey de un amo daña a su siervo, el dueño debe indemnizarlo.

  5. Ex 21:33 Si alguien crea un peligro (como cavar un pozo) y alguien es perjudicado por ello (cae al pozo), el que causó el daño es responsable y debe indemnizar.

  6. Ex 22:1 Si alguien hurta y vende lo robado pagará cinco veces su valor o conforme sea valorizado.

  7. Ex 22:4 Si alguien fuere hallado con lo que robo, pagará el doble.

  8. Ex 22:14 Si alguien daño algo que pidió  prestado (como un objeto o animal de trabajo, etc.)  deberá restituir o pagar por los daños que causó.

Existen muchos más detalles concernientes a la restitución en la porción bíblica de Mishpatim, pero este listado nos permite entrar en contexto para la siguiente ley que analizaremos.

Ley del ojo por ojo

En este contexto de restitución, indemnización, justicia social, equidad y temor ante cometer un asesinato es que la Torah introduce un ejemplo, y la famosa frase mal entendida del Nuevo Testamento y relacionada a las leyes de Hamurabi como la Ley de Talión/ ojo por ojo y diente por diente. 

​כב  וְכִי-יִנָּצוּ אֲנָשִׁים, וְנָגְפוּ אִשָּׁה הָרָה וְיָצְאוּ יְלָדֶיהָ, וְלֹא יִהְיֶה, אָסוֹן--עָנוֹשׁ יֵעָנֵשׁ, כַּאֲשֶׁר יָשִׁית עָלָיו בַּעַל הָאִשָּׁה, וְנָתַן, בִּפְלִלִים
כג  וְאִם-אָסוֹן, יִהְיֶה--וְנָתַתָּה נֶפֶשׁ, תַּחַת נָפֶשׁ
כד  עַיִן תַּחַת עַיִן, שֵׁן תַּחַת שֵׁן, יָד תַּחַת יָד, רֶגֶל תַּחַת רָגֶל 
כה  כְּוִיָּה תַּחַת כְּוִיָּה, פֶּצַע תַּחַת פָּצַע, חַבּוּרָה, תַּחַת חַבּוּרָה

Éxodo 21:22 Si algunos riñeren, e hirieren a mujer embarazada, y ésta abortare, pero sin haber muerte [la mujer ni el bebe deben morir], serán penados conforme a lo que les impusiere el marido de la mujer y juzgaren los jueces.
23 Mas si hubiere muerte, entonces pagarás vida por vida,
24 ojo por ojo, diente por diente,  mano por mano, pie por pie,
25 quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe.

Este párrafo presenta dos escenarios:

  1. Si dos hombres riñeren y causaren daño a una mujer embarazada pero no causando muerte, probablemente causando que el bebé nazca prematuro, el marido de la mujer y padre del bebé es responsable de demandar para que el culpable indemnice según sea el juicio y la demanda del padre de familia. En parte, esto es lógico o algo intuitivo, es más, esta responsabilidad o demanda hace eco a las leyes de la antigua Mesopotamia donde en una misma situación, el padre exige la demanda por la pérdida debido al poder patriarcal. La Torah en muchas ocasiones enseña cosas que aparentemente son obvias, como el simple hecho de la restitución, ya que puede ser lógico para muchos, pero no es así para todos. Entonces, por esta razón Dios usó el ejemplo de una mujer embarazada y de hombres que riñen, ya que es un ejemplo didáctico y conocido. Esto no presenta una postura machista ante la superioridad del hombre sobre la mujer, sino su deber de cuidarla y a sus hijos, y a su vez, refleja la naturaleza del contexto cultural en el que fue escrito. De todos modos, un principio común halájico en el judaismo es que se debe entender que la misma instrucción que aplica a un hombre es para la mujer, a no ser que sea exclusiva. 

  2. El siguiente ejemplo enseña "mas si causares muerte, darás vida por vida". 

La complejidad de esta frase

El versículo 23 es complejo, y presenta una supuesta contradicción o  diferencia con los otros tipos de daños. Los otros ejemplos del párrafo relacionados a esta historia presentan dos escenarios:

  1. Cuando alguien daña con alevosía a su prójimo: Como consecuencia debe restituir por los daños o gastos médicos (una moderna interpretación)

  2. Cuando alguien mata a su prójimo con alevosía: Como consecuencia debe morir.


Éxodo 21:23 tiene un poco de ambas. Los hombres discutían así que se puede entender que había alevosía, pero por accidente terminó perjudicada la esposa de uno y la vida del que se gestaba en su vientre, causando la muerte. De acuerdo a lo anteriormente establecido en la Torah, el culpable de hecho sería inocente, porque no tenía la intención de dañar a la  mujer o su hijo (a), pero sí tenía una mala intención contra su esposo. Estableciendo este argumento y complejidad, quiero hacer entender al lector por qué este pasaje ha sido tan complejo de entender por siglos. Primeramente, porque es una situación única y compleja de entender en sus propio contexto, y en segundo lugar,  porque no se lee el texto.

La interpretación Rabínica

עין תחת עין. קבלת רז"ל בזה דמי עין ולא עין ממש, והראיה מה שהזכיר למעלה רק שבתו יתן ורפא ירפא ואם נעשה באיש אשר יכה את רעהו כאשר עשה בו מה ישלם אחרי כן והוא גם הוא צריך שבת ורפוי, ועוד כי זה שהוציא עין חברו אילו עשינו לו כן והוציאנו את עינו לא כל הטבעים שוים ואולי השני יומת בהוצאת עינו מפני שטבעו רך מן הראשון והתורה אמרה עין תחת עין ולא עין ונפש תחת עין וא"כ אין בזה השואת היושר והמשפט לכל טבעי בני אדם זולתי בדמים, ועוד הכתוב שאמר ואיש כי יתן מום בעמיתו כאשר עשה כן יעשה לו שבר תחת שבר עין תחת עין שן תחת שן כאשר יתן מום באדם כן ינתן בו אי אפשר שיתקיים הכתוב הזה אלא כפי קבלת רז"ל בדמים ולא נטילת אבר ממש לפי שאי אפשר לאדם לעשות חבורה כאותה שעשה לו חברו באורך וברוחב ובעומק ולא יתכן לו לצמצם, ואם יעשה פחות או יותר לא קיים כאשר עשה כן יעשה לו, אלא מכאן שאינו ממש אלא דמים כדמי מה שעשה לא פחות ולא יותר

"Un ojo por ojo". Mejilat Nezikin sección 8 entiende estas palabras como "el valor de un ojo por un ojo," y no que el culpable está siendo privado de su propio ojo físico.  Prueba de que  esta interpretación  es correcta puede ser deducido del versículo 19 donde la Torah legisla la compensación financial por las heridas causadas al prójimo. Si tuviéramos que infligir sobre una persona que ha golpeado y causado heridas  a otra persona, una herida similar al que él infligió  ¿Qué mas podría él pagar si no le quedan ojos? el mismo estaría en necesidad de atención médica y el mismo padecería sufrimiento y pérdida mientras esté en recuperación. Es más, si tuviéramos que aplicar el principio de "ojo por ojo" literalmente, resultaría  en ninguna clase de justicia. Si un hombre  daña el ojo de una persona  y al culpable se le quita su único ojo restante (por haber perdido el otro por ej. en un accidente), el primero  quedara con un ojo mientras el culpable quedaría tendido ciego sin ojos, por lo tanto, ¿Qué tipo de justicia sería ésta? Incluso,  si al culpable le quitaren su ojo y por ser más débil no sobrevive  ante esta  cirugía, terminaría pagado con la muerte mientras al primer perjudicado solo le fue quitado o dañado un ojo. Ciertamente esto no sería justicia. La única forma de entender versículos 24-27 es que se trate de hacer una compensación por los daños causados.

Entonces, de acuerdo a los interpretes judíos Talmúdicos, el principio del "ojo por ojo y diente por diente" no se trata de amputar el ojo o la mano y según sea el daño al culpable, sino que éste debe restituir el valor monetario de Ej: un ojo, un diente, una mano, etc. Ahora bien, la pregunta aún persiste, ¿Por qué el párrafo  sigue hablando de un ojo o un diente o una mano si la persona ya murió?

Según nuestra comprensión,  Dios está enseñando a los jueces cómo determinar el valor  de esta indemnización cuando hay muerte. Por ejemplo, si alguien daña a uno de sus siervos se indemniza dando libertad; si alguien daña el ojo de su prójimo debe indemnizarlo según los gastos médicos y el tiempo que esté en cama; Finalmente, en el ejemplo de la mujer embrazada  que muere o su bebé,  los jueces sumaran el valor de dos manos, dos pies, dos brazos, sus dientes, etc, y ese valor debe pagar el que causó la muerte del inocente; por eso el párrafo comienza diciendo ¡darás vida por vida! Como diciendo pagarás por la vida de esa persona, sus manos, sus pies, sus ojo, ¡restituirás todo!

 

Otros interpretan que pagarán por lo que dañó de la persona cuando le causó su muerte; por ejemplo, si la empujó y murió fracturada de su pierna, entonces el valor a indemnizar será el de su pierna. De todos modos, pese a que este escenario pueda ser desactualizado y lo arcaico que puede parecer debido a las posibilidades que habían cuando la Torah fue escrita, la Torah presenta una justicia perfecta, para su generación, sin embargo, hoy muchos fallan en restituir, indemnizar o pagar lo que dañan o deben cuando supuestamente es un principio lógico.

 


Cabe decir a este respecto que históricamente esta ley de restitución "ojo por ojo y diente por diente" se ha interpretado y aplicado siempre como una ley de indemnización y de valorización, a diferencia de otras culturas coetáneas, como la de Babilonia y su código de Hamurabbi, que sí tenía normas de penas físicas. La ley mosaica siempre se consideró, por los estudiosos, mucho más humanitaria y distante con respecto a sus coetáneos.

La controversia del Nuevo Testamento/ Jesús y la Ley

La controversia del Nuevo Testamento no creo que sea del libro en particular, sino de sus intérpretes, pues mal interpretan dos cosas, el "¿Qué?" y el "¿Quién?" de la historia  original en la Torah. Por ejemplo, La Torah establece que lo que se debe hacer es "restituir", no sacar literalmente un miembro del cuerpo del prójimo, mientras muchos creyentes del Nuevo Testamento entienden que Dios ordena a salvajemente arrancarle el ojo al culpable. El segundo  concepto es el más mal interpretado: ¿Para quién es el mandamiento?

Mateo 5:38 »Habéis oído que se dijo: “Ojo por ojo y diente por diente”. 39 Pero yo os digo: No resistáis al que os haga mal. Si alguien te da una bofetada en la mejilla derecha, vuélvele también la otra. 40 Si alguien te pone pleito para quitarte la camisa, déjale también la capa. 

​Toda esta sección del "Sermón del Monte" parece presentar un debate entre "Lo que fue oído" VS "La enseñanza de Yeshua". "Ustedes oyeron tal cosa pero yo digo que hagan lo opuesto".  El lector y creyente en la Fe cristiana debe entender que jamás entenderá a su Mesías sin previamente entender el mensaje original en la Torah. Antes que todo debemos establecer, ¿a qué se refiere Jesús con lo que fue oído o habéis escuchado? ¿Se refiere a la Torah? ¿Se refiere al Antiguo Testamento? ¿o se refiere a otra cosa? Basado en esto ¿Está Yeshua oponiéndose al mensaje de la Torah o estableciendo nuevas leyes? ¿o qué está haciendo?

Si volvemos a la lectura original de la Torah entenderemos  el "quién" o "receptor" de esta ordenanza.

ב  וְכִי-יִנָּצוּ אֲנָשִׁים, וְנָגְפוּ אִשָּׁה הָרָה וְיָצְאוּ יְלָדֶיהָ, וְלֹא יִהְיֶה, אָסוֹן--עָנוֹשׁ יֵעָנֵשׁ, כַּאֲשֶׁר יָשִׁית עָלָיו בַּעַל הָאִשָּׁה, וְנָתַן, בִּפְלִלִים
כג  וְאִם-אָסוֹן, יִהְיֶה--וְנָתַתָּה נֶפֶשׁ, תַּחַת נָפֶשׁ
כד  עַיִן תַּחַת עַיִן, שֵׁן תַּחַת שֵׁן, יָד תַּחַת יָד, רֶגֶל תַּחַת רָגֶל

Éxodo 21:22 Si algunos riñeren, e hirieren a mujer embarazada, y ésta abortare, pero sin haber muerte [la mujer ni el bebé deben morir], serán penados conforme a lo que les impusiere el marido de la mujer y juzgaren los jueces.
23 Mas si hubiere muerte, entonces  darás  vida por vida,
24 ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie,

En el versículo 23, Dios  ¿A quién le esta hablando? ¿le está hablando al marido, a la mujer o al culpable en la historia? Claramente Dios le está hablando al culpable, pues "darás" [natan] es una orden directa al que debe restituir. O sea, la mala interpretación del texto es que muchos entienden que Dios está hablando al inocente en la historia, como diciendo que si alguien te quita el ojo ve y arráncale el otro, pero no es así, en Éxodo 21 Dios se dirige al que cometió la falta diciendo "si tú heriste, dañaste, causaste la muerte, tú darás vida por vida, ojo por ojo, etc. Ahora, si vemos lo que Yeshúa enseña, no es nada contrario a lo que la Torah dice, sino que, al contrario, está corrigiendo una mala interpretación que había en aquellos días, al parecer. En otras palabras, Yeshúa está diciendo que habían escuchado (o podría haber dicho, que fueron enseñados) quita el ojo por ojo, o diente por diente, pero Yeshúa enseña que ¡no hagan tal cosa! porque la Torah no manda a hacer daño al prójimo, sino que el famoso principio de ojo por ojo es una orden directa al que debe restituir, y no al perjudicado para cobrar venganza por su cuenta.

En esta última sección de "La Controversia del Nuevo Testamento", pretendo permitir al lector una comprensión del principio de la restitución y del ojo por ojo en su contexto escrito, de acuerdo a la Torah, para notar que al parecer Yeshúa no estaba enseñando algo contrario a ella, sino salvándola y devolviéndose su valor frente a las malas interpretaciones, que al parecer habían en el periodo del Segundo Templo.

A menudo escucho a cristianos seguidores de la Torah intentando obedecer la Torah en aras de seguir a su maestro Yeshua pero luego explicando la superioridad o las reformas de Jesús frente a la Ley Mosáica. Este ejemplo debería ser un análisis a considerar, ya que pareciera que Yeshúa solo la enseñaba en su contexto, a diferencia de las otras interpretaciones del momento, pero no está en oposición a la Torah en estos ejemplos.

En Sumatoria:

YHVH estableció instrucciones perfectas en su Torah. Una de ellas es el principio de la restitución conocida como "La ley del ojo por ojo", la cual no es más que una instrucción de justicia y misericordia de Dios para que el que cometa un daño restituya conforme al valor de lo dañado. En ocasiones un buey robado, un objeto prestado y dañado, una pelea causando daños o la muerte; Para cada una de ellas hay una solución llamada restitución. Por siglos esta instrucción ha sido mal interpretada, especialmente confundida con las leyes de Hamurabbi  de Babilonia, y por una mala comprensión de las enseñanzas de Yeshúa en el Nuevo Testamento.  Sin embargo, las enseñanzas de Yeshúa parecen resonar con las interpretaciones tradicionales judías, y la razón de explicación, así como la de los rabinos talmúdicos parece que se debía a que un grupo de intérpretes pensaba que si debían cobrar justicia a través de la violencia. 

A veces los intérpretes erran, el hecho de que ambas interpretaciones existen es porque claramente habían oponentes, o tal vez solo personas que piensan distinto. Esta vez, hemos podido reconstruir la interpretación correcta de Restitución Bíblica gracias al mensaje de Yeshúa, que para los cristianos es el mesías, y la interpretación Talmúdica (Rabínica).

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