Devar Torah Parasha Tetzaveh

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A pesar de cuan aburrida encuentro esta porción bíblica, no puedo ignorar la cantidad de detalles que Dios reveló a Moisés para que construyan un pequeño artefacto u otro para la edificación del Tabernáculo. 

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Algunos escolares han notado que existe un evidente énfasis entre la narrativa de la Creación y los detalles de esta porción, por ejemplo:

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1)Éx 39:43 dice: Moisés vio todo su trabajo, y he aquí, tal como Yehovah  lo había ordenado, lo habían hecho, y él los bendijo.

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1)Gén 1:28 también dice: "Dios vio todo lo que había hecho, y he aquí, fue muy bueno ..." (Génesis 1:31) "Y Dios los bendijo ..."​

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2)Moisés completó el trabajo, (Éxodo 40:33)

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​2)El cielo y la tierra se completaron ... Y Dios completó, en el séptimo día, el trabajo que había hecho. (Génesis 2: 1-2)

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Éxodo 25–31, de hecho se ha construido en siete partes, con cada sección marcada por nuevos anuncios de Dios hablando a Moisés o siete ordenes ("Y Dios le habló a Moisés" vs "Y dijo Dios hágase..."). La séptima de estas secciones es la orden de observar el Shabbat en Éxodo 31: 13-17. La primera exposición de la creación del Tabernáculo podría de hecho reflejar a los seis días de la Creación culminando con el la orden de guardar el Shabbat en Éxodo 31:13 de la misma forma como Dios construyó o creo los cielos y la tierra en seis días pero cesó su labor en el séptimo día.

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Más conexiones literarias puede encontrar en la página web UnaTorah.com, no obstante, estos detalles nos permiten ver la percepción que tuvieron que tener los antiguos israelitas hacia esta construcción que estaban haciendo. En cierto modo, el Templo era necesario y sabemos por la evidencia arqueológica que lejos de que estas cosas sean originales de Dios o la Torah, en realidad, se asemejaban a los cultos de sus naciones vecinas, pero por sobre esto, la forma en que la Torah fue redactada nos permiten ver la relación entre "La perfección de la creación y la perfección del Tabernáculo".

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Cómo sabemos los templos pretenden simbolizar a la deidad, ya que a Dios no le gustan las imágenes, a través de todos estos detalles y decoraciones minuciosas, El dio a los israelitas algo que puedan conectar hacia Dios. Así como vemos la perfección de la naturaleza, una obra perfecta, incluso cuando compuesta de objetos abstractos logra su perfecto equilibro, el Mishkan y el minuciosos proceso de su construcción debía asombrar los ojos de todos lo que lo vieran. Ese extremo y perfecto orden, equilibro e ingeniería que se percibiría cuando el Tabernáculo estaba erigido, asombraría a los israelitas y los conmovería a reverenciar a Dios.

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Así como la perfección de Dios se puede, en parte, percibir de una pequeña construcción que vagabundeaba en el desierto, no puedo pasar por alto las veces que he tenido que vivir o viajar a otros países más civilizados del que me encuentro ahora y ver como sus ciclo vías funcionan a la perfección, o como ciudades modernas son equilibradas con la naturaleza y el medio ambiente. Ciertamente estamos lejos de la perfección, pero todo el avance tecnológico y de ingeniería que hemos logrado como humanidad me hace pensar como hoy podemos ver más cerca a Dios en todo lo que como humanos hemos construido con la inteligencia que viene del espíritu de Dios. 

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Nuestro siguiente desafío sería usar estas habilidades con conciencia y sin perjudicar nuestras vidas, como por ejemplo no gastar nuestro conocimiento en la reproducción de armas de guerra o construcciones masivas que perjudican el medio ambiente. 

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En lo personal, espero por ese Jerusalen que describieron los profetas de Israel, donde el arca del pacto ya no sería recordada ni reconstruida, sino la propia ciudad de Dios representaría su excelencia y el pacto de Yehováh, o donde toda la ciudad representaría el santuario único. Ruego para que la violencia que esta pasando por estos días en Israel pueda llegar a su conclusivo fin y la paz reflejada en el orden de la ciudadanía pueda ser un ejemplar para todas las naciones del mundo.