Deuteronomio 3:23 7:11
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Moshé le cuenta al Pueblo Judío cómo le imploró a Dios que le permita ingresar a la Tierra de Israel. Dios se negó, pero le indicó que ascienda una montaña para ver la Tierra Prometida.

Continuando con su “repaso de la Toráh”, Moshé describe el Éxodo desde Egipto y la Entrega de la Toráh, declarándolos eventos sin precedentes en la historia de la humanidad. “¿Alguna vez ocurrió este gran evento, o algo similar alguna vez se oyó? ¿Alguna vez un pueblo escuchó la voz de Dios hablando desde el fuego...y vivió? ... Tú viste, para saber, que Dios es Dios y no hay otro excepto Él”.
Moshé predice que, en generaciones futuras, la gente se alejará de Dios, adorará ídolos, será exiliada de su tierra y esparcida por las naciones del mundo; pero allí ellos buscarán a Dios y retornarán a observar sus preceptos.
Nuestra parashá también incluye una repetición de los Diez Mandamientos, y los versos del Shemá que declaran los fundamentos de la fe judía: la unicidad de Dios (“Escucha Israel, Dios es nuestro Dios, Dios es uno”); los preceptos de amor a Dios, estudiar su Torá y “atar” estas palabras como Tefilín en nuestro brazo y cabeza, e inscribirlas  en las jambas de nuestras puertas.

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