Historia y origen
La primera referencia bíblica sobre la fiesta de Los panes sin Levadura se encuentra en Éxodo 12, en un periodo de aflicción, en donde los israelitas eran oprimidos por los egipcios al ser sometidos a la esclavitud, y Dios, a su vez, con mano poderosa juzgaba con plagas a la nación de Egipto.
La última de estas plagas era la que marcaría el fin de la opresión y un nuevo comienzo para el pueblo de Israel. Yehovah heriría en ella con muerte a todos los primogénitos de la tierra de Egipto, dejando aparte solo a los que hiciesen el sacrificio de la Pascua [un cordero de hasta un año de edad y sin mácula] y pintaran con la sangre del mismo los dinteles de sus casas, para que cuando pase el ángel de la muerte, éste pase por alto [Pesaj] aquella casa y no traiga a ella la plaga de muerte. Así, al día siguiente los israelitas fueron liberados y comenzaron su travesía por el desierto camino a la Tierra prometida. Esta salida tuvo que ser muy apresurada, y en razón de esto, Dios de antemano ya les había dado el mandamiento de consumir panes sin levadura, y continuar consumiéndolos por siete días más.
En conmemoración de la libertad, y de la gracia y favor de Dios hacia su pueblo Israel, Yehováh ordenó celebrar esta Fiesta por todas las generaciones como ordenanza perpetua, la llamada "Fiesta de Los Panes sin Levadura".