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La Ley Universal: Ama a tu prójimo como a ti mismo


El origen y cómo el amor al prójimo se convirtió en la ley de oro y la base de nuestras modernas civilizaciones.
Picture
"Haz a otros como te gustaría que te hagan a ti" Mosaico basado en el cuadro “La regla de oro” de Norman Rockwell (1961). wikimedia
Sin importar nuestros credos, nacionalidad o grupo religioso específico al que pertenezcamos, la frase "Ama a tu prójimo como a ti mismo" y sus derivados, han sido incrustados en nuestras más arraigadas ideologías.

Como judíos, estamos familiarizados con el precepto de Levítico 19:18 וְאָהַבְתָּ לְרֵעֲךָ כָּמוֹךָ “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”, que se encuentra en la Colecta de Santidad (Levítico 17–26) que se lee cada año como costumbre en la lectura de los Parashot. Además, éste pasaje específico (Levítico 19) siendo éste la referencia más antigua a esta regla de oro que ha impactado el rumbo de la humanidad, contiene numerosos ejemplos de cómo Dios pretendía que la sociedad se conduzca, entre lazado con algunos preceptos de ritos como sacrificios y otras leyes derivadas. 

Esto nos lleva a la pregunta más importante, ¿Qué es el amor? o ¿Cómo es que estos pasajes describen el amor hacia el prójimo?

¿Qué es el Amor?

A menudo pensamos que el amor es "una atracción", como un sentimiento o emoción incontrolable de gran afecto hacia otro individuo, y auqnue todo aquello puede ser muy cierto, quizás desde una perspectiva filosófica, el mandamiento de amar al prójimo, es decir, poner el amor en la práctica conlleva acciones y no (necesariamente) sentimientos, como lo describen los versos adyacentes a Levítico 19:18, por ejemplo: 
קרא יט: יג לֹא תַעֲשֹׁק אֶת רֵעֲךָ ″ ְלֹ תִגְזֹלא תָלִין פְּעֻלַּת שָׂכִיר אִתְּךָ עַד בֹּקֶר .... יט: טא לֹ  תַעֲשׂוּ עָוֶל בַּמִּשְׁפָּט לֹא תִשָּׂא פְנֵי דָל ″ תֶ פְּנֵ פְּנֵ  גָד בְּצֶדֶק עֲמִ תֶךָ. יט:טז לֹא תֵלֵךְ רָכִיל בְּעַמֶּיךָ לֹא תַעֲמֹד עַל דַּם רֵעֶךָ אֲנְָ֕.
Lev 19:13 No defraudarás a tu prójimo; no robarás; y no guardarás para ti el salario de un jornalero hasta la mañana…. 19:15 No pronunciarás juicio injusto; no serás parcial con los pobres ni condescendientes con los grandes: con justicia juzgarás a tu prójimo. 19:16 No andarás calumniador entre tu pueblo, ni te aprovecharás de la sangre de tu prójimo: Yo Yehováh.
Por consiguiente, el amor, de acuerdo a los pasajes más originales sobre esta ideología, no es una emoción aquí, sino que se refiere a tratar al prójimo con justicia, o de la misma manera que quisieras que te traten a ti. 

¿Quién es el prójimo?

La mayoría de los eruditos contemporáneos están de acuerdo en que el “prójimo” (רע) en Levítico 19 se refiere a los miembros de la comunidad israelita o judía. Aunque la palabra en sí no se refiere necesariamente a los israelitas y literalmente significa a otro, o al que este al lado tuyo,(Véase Gén 11:3 y Gén 15:10). Es decir, en hebreo, este pasaje dice literalmente, ama al que esté al lado tuyo, no obstante, el contexto de este párrafo es determinante:
יז  לֹא-תִשְׂנָא אֶת-אָחִיךָ, בִּלְבָבֶךָ; הוֹכֵחַ תּוֹכִיחַ אֶת-עֲמִיתֶךָ, וְלֹא-תִשָּׂא עָלָיו חֵטְא
יח  לֹא-תִקֹּם וְלֹא-תִטֹּר אֶת-בְּנֵי עַמֶּךָ, וְאָהַבְתָּ לְרֵעֲךָ כָּמוֹךָ:  אֲנִי, יְהוָה
Lev 19:17 No aborrecerás a tu hermano en tu corazón; reprenderás a tu pariente , y no incurrirás en culpa a causa de él. 19:18 No te vengarás ni guardarás rencor a ninguno de los tuyos , sino que amarás a tu prójimo como a ti mismo; Yo soy YeHoVaH.”
El término “prójimo” es el cuarto de una secuencia que incluye “hermano”, “pariente” y “tu pueblo”. Estos sinónimos, por lo tanto, aclaran la definición adecuada de prójimo en este contexto, tratándose de un compañero o aliado israelita que está a tu lado.

Kamoja: Como a ti mismo o alguien como tu

La parte más difícil de la formulación en Levítico 19:18 es el uso de la palabra kamoja . La interpretación más común es interpretar la frase adverbialmente, es decir, la forma en que debes amarlos es de la misma manera en que te amas a ti mismo (kamoja). Por ejemplo, Abraham ibn Ezra (1089–1167) uno de mis comentaristas del Peshat favoritos escribe:
ועל דעתי: שהוא כמשמעו, שיאהב הטוב לחבירו כאשר יאהב לנפשו
En mi opinión, significa lo que parece, que uno debe amar para que le suceda el bien al prójimo como uno lo amaría para uno mismo.
No obstante, hay otros que interpretaron esta frase de una forma alternativa, como el rabino Samuel ben Meir (Rashbam), contemporáneo de Ibn Ezra:
אם הוא רעך שהוא אדם טוב כמוך.  אבל אם הוא רשע – כדכתיב: יראת י״י שנאת רע.

Si es tu prójimo, es que es una buena persona como tú. Pero si es malo, así está escrito (Prov 8:13): “Temor de Yehováh es aborrecer al impío”
Esta interpretación menos popular, sugiere que debemos amar a las personas buenas "solamente", o donde se refleje un amor recíproco, debido a que Proverbios 8 nos enseña a aborrecer al impío.

¿Qué hay sobre el extranjero?

Aunque la perspectiva de Rashbam no es las más aceptada en este pasaje en particular, el contexto del pasaje en discusión sí sustentan la creencia de que el mandamiento de "amar al prójimo como a uno mismo" es específicamente para la comunidad israelita o aquellos que son como tu, aunque no necesariamente personas buenas. Sin embargo, el pasaje continúa hablando sobre el trato hacia otras personas y en los siguientes versículos expande ese mismo amor, hacia los extranjeros. 
לג  וְכִי-יָגוּר אִתְּךָ גֵּר, בְּאַרְצְכֶם--לֹא תוֹנוּ, אֹתוֹ
לד  כְּאֶזְרָח מִכֶּם יִהְיֶה לָכֶם הַגֵּר הַגָּר אִתְּכֶם, וְאָהַבְתָּ לוֹ כָּמוֹךָ--כִּי-גֵרִים הֱיִיתֶם, בְּאֶרֶץ מִצְרָיִם:  אֲנִי, יְהוָה אֱלֹהֵיכֶם
Lev 19:33 Cuando un extranjero resida con vosotros en vuestra tierra, no lo oprimiréis. 19:34 El extranjero que mora con vosotros os será como natural nacido entre vosotros; amarás al extranjero como a ti mismo, porque extranjeros fuisteis vosotros en la tierra de Egipto; Yo soy Yehovah tu Dios.
 En este caso, es claro que el extranjero no es como uno mismo y posiblemente éste tenga otro nivel espiritual o relación con Yehováh su Dios, como la de un "ger". Sin embargo, la frase "como a ti mismo" es igual que la descripción del amor al prójimo en el verso 18 que tratan sobre un compatriota israelita. Esto comprueba que la interpretación de Abraham Ibn Ezra, que es la comprensión más común o aceptada entre los escolares y religiosos, es la más correcta.
Dicho de otra manera,  "amar al prójimo  como a uno mismo" es un mandamiento que debemos obrar hacia personas que sean tanto iguales a nosotros o diferentes, y así como los extranjeros traen a memoria la vida pasada de los hebreos esclavos de Egipto, amar al prójimo como a unos mismo significa tratar o hacer con el prójimo o extranjero como  a uno le gustaría ser tratado o amado. 

Resumen:

En resumen, algunas cosas parecen claras sobre la ley de amar al prójimo como a uno mismo, y su paralelo de amar al ger , en su contexto original:
  1. Aquí el amor no es cuestión de sentimientos sino de práctica.
  2. El mandamiento del amor no parece universal como un mensaje para que los israelitas amen al mundo, sino que se aplica solo a sus compatriotas israelitas (19:18) y al ger (19:34). Es decir, a los que están dentro de tu comunidad o sociedad.
  3. La preposición y el sufijo kamoja se usan adverbialmente para indicar cómo se debe amar al prójimo o al extraño. El cual consiste en que el amor debe ser una muestra de como desearíamos que nosotros seamos amados.
​

Por lo tanto, amar a los prójimos (compatriotas israelitas) como a uno mismo es tratarlos como a uno mismo le gustaría ser tratado. Tratar a los extranjeros como a uno mismo es tratarlos como si fueran israelitas nativos o poniéndonos en el lugar de un extranjero y cómo nos gustaría ser tratados.

Cómo ésta regla resurgió en el Periodo del Segundo Templo

Los autores del Segundo Templo en los períodos griego y romano hicieron uso de estas leyes en sus obras. Por ejemplo, el libro de los Jubileos (siglo III AEC ) hace varias alusiones al mandamiento del amor, en las historias de Noé, Abraham, Jacob, José y el éxodo, aunque nunca cita el mandamiento de amar al ger . Restringiendo así su aplicación a otros no judíos. El Documento de Damasco ( siglo II AEC ) alude claramente a ambos, instruyendo a los miembros de la comunidad a (CD 6:20):
​
Documento de Damasco (siglo II AEC)
Amar a su hermano como a sí mismo, apoyar a los pobres, indigentes y ger (extranjero converso) , y buscar cada uno la paz de su hermano.
En la época de los rollos de Qumram, el ger es visto como un gentil converso, aquel extranjero que decidió guardar la Fe del pueblo de Israel, como Ruth, en la Biblia. Esto infiere que el amor hacia los gentiles o los extranjeros o gentes de otras nacionalidades no era un énfasis que los judíos hacían, es decir, a pesar de que Levítico 19 nos manda a amar a nuestros compatriotas o a la persona que esta al lado nuestro, como a los extranjeros, ellos veían a esos extranjeros como otro israelita más de su pueblo y no lo categorizaban como un gentil o extranjero.

Un ejemplo de este trato hacia los extranjeros de hecho se puede ver en la famosa história del Nuevo Testamento :
Nuevo Testamento, Mateo  15:24
22 Y he aquí una mujer cananea que había salido de aquella región clamaba, diciéndole: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí! Mi hija es gravemente atormentada por un demonio. 23 Pero Jesús no le respondió palabra. Entonces acercándose sus discípulos, le rogaron, diciendo: Despídela, pues da voces tras nosotros. 24 Él respondiendo, dijo: No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel. 25 Entonces ella vino y se postró ante él, diciendo: ¡Señor, socórreme! 26 Respondiendo él, dijo: No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perros. ​
Este pasaje demuestra dos veces como, tanto Jesús y sus discípulos no estaban dispuestos a ayudar a un extranjero que residía en la propia tierra de Israel, incluso cuando esta persona parecía ser consiente de las promesa y profecías de la Biblia, (que muy bien podría calificar o parecerse al estatus de un ger, los extranjeros que LEvítico 19:33 nos manda a mar), justificándose con el hecho de que su ayuda o ministerio estaba únicamente enfocado a los descendientes de Israel, no a los perros, como Jesús, o los escritores del Nuevo Testamento denigrantemente describían a los gentiles. No obstante, el mismo Jesús luego enseña sobre el amor al prójimo, y eleva el estatus de una mujer samaritana por sobre un levita y sacerdote, indicando que aquella mujer es considerada "el prójimo" porque ayudo y no los mismos compatriotas judíos que no se detuvieron a ayudar. Es decir, Yeshua parecía tener un gran afecto hacia un extranjero que "mostraba estar guardando un mandamiento" pero a su vez, un desprecio por un extranjero canaanita que quizás a sus ojos era una mujer impía.

No obstante, esta perspectiva no era la única entre los judíos del perioso del Segundo Templo,como se refleja en una serie de historias del Primer Siglo. El sabio, Hillel el Anciano, cuenta en el Talmud de Babilonia la siguiente historia (impresión de Venecia):
​שוב מעשה בגוי אחד שבא לפני שמאי אמר ליה גיירני ע"מ שתלמדיני כל התורה כולה כשאני עומד על רגל אחת דחפו באמת הבניין שבידו בא לפני הילל גייריה א[מר] ליה דעלך סני לחברך לא תעביד זו היא כל התורה כולה ואידך פירושה הוא זיל גמור
Ocurrió nuevamente que un gentil se presentó ante Shamai. Él le dijo: "Conviérteme con la condición de que me enseñes toda la Toráh mientras estoy parado sobre una pierna". Lo empujó con la vara de medir (cubo). [El gentil] se presentó ante Hillel, quien lo convirtió. Él (= Hillel) le dijo: “Lo que es detestable para ti, no se lo hagas a tu prójimo. Esta es toda la Toráh completa; el resto es su explicación. Ve y aprende.
Lo significativo aquí es que, para Hillel, esta regla es un principio moral trascendente, que abarca todos los demás mandamientos. Si bien Hillel vivió en el siglo I a.c. , el Talmud de Babilonia solo se escribió en el siglo VI DEC., lo que dificulta evaluar la validez histórica de esta historia. Sin embargo, una fuente mucho más antigua, la Sifra, un comentario rabínico del siglo III sobre Levítico, atribuye una reflexión similar al siglo II . DEC sobre el sabio, Rabí Akiva (Sifra, Kedoshim 2:4.12):
ואהבת לרעך כמוך, רבי עקיבא אומר זה כלל גדול בתורה
“Ama a tu prójimo como a ti mismo”: Rabí Akiva dice: “Este es el gran principio general en la Toráh”.
La mayoría de los lectores de UnaTorah.com son cristianos o profesan la creencia de que Yeshúa es el mesías y sé que el primer ejemplo sobre la mujer cananea puede parecer que hemos comenzado con el pie izquierdo, como dice el dicho, pero sin duda es justo decir que el mismo rabino judío popular también enseño las mismas palabras de estos dos sabios judíos que le antecedieron basados en Levítico 19:18.

Amor hacia el prójimo en Los Evangelios

En el Evangelio de Marcos, el primero de los evangelios canónicos, Jesús declara que esta ley es uno de los dos mandamientos más importantes para un judío, junto con el mandamiento de amar a Dios que se encuentra en el Shemá :
​Κατά Μάρκον 12:28 Καὶ προσελθὼν εἷς τῶν γραμματέων ἀκούσας αὐτῶν συζητούντων, ἰδὼν ὅτι καλῶς ἀπεκρίθη αὐτοῖς ἐπηρώτησεν αὐτόν· ποία ἐστὶν ἐντολὴ πρώτη πάντων 12:29 ἀπεκρίθη ὁ Ἰησοῦς ὅτι πρώτη ἐστίν· ἄκουε, Ἰσραήλ, κύριος ὁ θεὸς ἡμῶν κύριος εἷς ἐστιν 12: 30 καὶ ἀγαπήσεις κύριον τὸν θεόν σου ἐξ ὅλης τῆς καρδίας σου καὶ ἐξ ὅλης τῆς ψοσουυ. Κ. 12:31 δευτέρα αὕτη· ἀγαπήσεις τὸν πλησίον σου ὡς σεαυτόν. μείζων τούτων ἄλλη ἐντολὴ οὐκ ἔστιν.
​Marcos 12:28 Uno de los escribas se acercó y los oyó discutiendo entre sí, y viendo que les respondía bien, le preguntó: ¿Cuál mandamiento es el primero de todos? 12:29 Jesús respondió: “La primera es (Dt 6:4–5): 'Escucha, oh Israel: el Señor nuestro Dios, el Señor uno es; 12:30 Amarás a YHVH tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y ​​con toda tu mente, y con todas tus fuerzas. 12:31 El segundo es este (Lv 19:18): 'Amarás a tu prójimo como a ti mismo.' No hay otro mandamiento mayor que estos.”
​El Evangelio de Mateo, que recoge esta historia de Marcos con sus propias palabras, añade “de estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas” (22,40).  El pasaje paralelo en Lucas 10:25–28, el tercer Evangelio sinóptico, recorre los dos pasajes—ama a Dios y ama a tu prójimo—juntos, como si fuera un solo pasaje:
​Κατά λουκάν 10:25 καὶ ἰδοὺ νομικός τις ἀνέστη ἐκπειράζων αὐν λέγων · Διδάσκαλε, τίσας ζωὴν αἰών κorro κληerv. 10:26 ὁ δὲ εἶπεν πρὸς αὐτόν · ἐν τῷ νόμῳ τί γέγραπται; πῶς ἀναγινώσκεις; 10:27 ὁ δὲ ἀποκριθεὶς εἶπεν· ἀγαπήσεις κύριον τὸν θεόν σου ἐξ ὅλης [τῆς] καρδίας σου καὶ ἐν ὅλῃ τῇ ψυχῇ σου καὶ ἐν ὅλῃ τῇ ἰσχύϊ σου καὶ ἐν ὅλῃ τῇ διανοίᾳ σου, καὶ τὸν πλησίον σου ὡς σεαυτόν. 10:28 .
Lucas 10:25 En ese momento, el erudito de la Torá ( nomikos ) se puso de pie para probar a Jesús. “Maestro”, dijo, “¿qué debo hacer para heredar la vida eterna?” 10:26 Él (Jesús) le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Qué lees allí? 10:27 Él (el erudito de la Torá) respondió: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y ​​con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo.” 10:28 Y él (Jesús) le dijo: Has dado la respuesta correcta; haz esto, y vivirás.” ​
​De todas estas fuentes, está claro que para el primer siglo de la era común, Levítico 19:18 había alcanzado un estatus exaltado entre los intérpretes judíos como un mandamiento especialmente importante, trascendente en el sentido de que incluía a todos los demás. También debo enfatizar, que Jesús enseña que para alcanzar "la vida eterna" uno debe guardar la Torah, el mensaje del Shema Israel (Drut 6:4), es decir, según Jesús no hay que aceptar o reconocer que Jesús es el mesías, ni que es hijo de Dios, ni que murio o resucito, o aceptar la asimilación entre Dios padre, hijo, espíritu, madre, etc. Está escrito en los versos recién citados.

Por otro lado, nada en las fuentes rabínicas o del Nuevo Testamento establece que ésta ley se aplica a todos los seres humanos. Incluso Jesús, como hemos leído, se rehúsa a ayudar a una extranjera porque no era lícito gastar sus energías con alguien que no sea de la comunidad israelita. Aunque su enseñanza sobre la mujer samaritana en el mismo pasaje de Lucas anteriormente citado parecía indicar que el amor al prójimo podría venir de una persona ajena, extranjera, incluso considerada un enemigo.

Esto nos lleva a una muy buena pregunta.

¿Debemos también amar a nuestros enemigos?

Desde la perspectiva cristiana, la historia sobre el amor hacia los enemigos en Mateo 5:43 es sin duda una de las historias donde los fieles cristianos se jactan y alaban las apasionadas palabras de inmensurable e irrazonable amor emitidas de parte de Jesús hacia la humanidad, como aquel que eleva el estatus de la Torah, o mejor aún, mejora o propone una ideología mucho más bondadosa y admirable que las enseñanzas de la cruel y malvada Ley de Moisés, al decir:
​Κατά μαθθαίον 5:43 ἠκούσατε ὅτι ἐρρέθη · ἀγαπήσεις τὸν πλησίον σου καὶ μισήσεις τὸν ἐχθρόν σου. 5:44 ἐγὼ δὲ λέγω ὑμῖν· ἀγαπᾶτε τοὺς ἐχθροὺς ὑμῶν καὶ προσεύχεσθε ὑπὲρ τῶν διωκόντων ὑμᾶς, 5:45 ὅπως γένησθε υἱοὶ τοῦ πατρὸς ὑμῶν τοῦ ἐν οὐρανοῖς, ὅτι τὸν ἥλιον αὐτοῦ ἀνατέλλει ἐπὶ πονηροὺς καὶ ἀγαθοὺς καὶ βρέχει ἐπὶ δικαίους καὶ ἀδίκους. 5:46 ἐὰν γὰρ ἀγαπήσητε τοὺς ἀγαπῶντας ὑμᾶς, τίνα μισθὸν ἔχετε; οὐχὶ καὶ οἱ τελῶναι τὸ αὐτὸ ποιοῦσιν; 5:47 τί περισσὸν ποιεῖτε; οὐχὶ καὶ οἱ ἐθνικοὶ τὸ αὐτὸ ποιοῦσιν;

​Mateo 5:43 Habéis oído que se dijo: Amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo. 5:44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen, 5:45 para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos; porque él hace salir su sol sobre malos y buenos, y hace llover sobre justos e injustos. 5:46 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿Ni siquiera los recaudadores de impuestos (=gente mala) hacen lo mismo? 5:47 Y si saludáis solamente a vuestros hermanos y hermanas, ¿qué más hacéis que los demás? ¿No hacen lo mismo los gentiles?
Nuevamente concerniente al amor al prójimo, esta claro que la audiencia de Jesús es a los judíos, su mala comparación a los gentiles, que su paralelo en el libro de Lucas los caracteriza como "pecadores" enfatiza que no debían ser como ellos, en contraste, debían elevar ese amor al prójimo que puede entenderse como una naturaleza de la ética humana, lo que se entiende como la "Ley Natural", que por lo tanto, no tiene méritos, y a su vez expandir ese mismo amor hacia sus enemigos.
​
Este pasaje no obstante tiene algunas falencias.
​Como es bien sabido entre los escolares bíblicos académicos del Nuevo Testamento, si comparamos los manuscritos más antiguos de los Evangelios, el primer problema que surge es que hay miles de manuscritos y ninguno es igual al otro, algunas frases fueron claramente agregadas y otras borradas posteriormente y esto hace difícil discernir cuáles palabras fueron originalmente dichas por Jesús, si es que fueron dichas.

En segundo lugar, este pasaje, que pretende enseñar sobre el amor, especialmente hacia el enemigo, muchas veces rivaliza las relaciones entre judíos y cristianos al ridiculizar la Torah que es considerada la Sagrada Palabra de Dios para el pueblo judío por una mejorada, al enseñar que "la Ley" decía que amen a su prójimo pero odien a sus enemigos, más Jesús les enseña algo mejor.

Finalmente, el mayor problema es que en ninguna parte de la Torah o la Ley, dice que debemos odiar a los enemigos, esto quiere decir que Jesús, o los escritores del NT no conocían la Torah lo suficiente porque su argumento se basa en un falso hecho y/o un falso testimonio de la Escrituras Hebreas.

Ahora bien, es justo decir que la Torah tampoco dice expresamente que debemos amar al enemigo, pero a través de los mandamientos de amor hacia el prójimo, podemos entender que estaba inferido. Además como hemos leído de los propios versos de Levítico 19 al inicio de este estudio, el amor en estos pasajes, tal como lo enseña Jesús no es una cuestión de sentimientos, sino de acciones u obras.

Por ejemplo, Levítico 19, que es el pasaje en discusión, dice que no debemos guardar rencor o enojo hacia nuestro prójimo, no calumniarlo, no robar de el o de ella, no derramar sangre inocente.
Ampliando nuestra imaginación sobre estas descripciones ¿Por qué alguien tendría estos pensamientos de maldad hacia alguien que es bueno o hacia un amigo o ser querido?
Es obvio aquí que la Torah nos manda a ejercer estas obras de amor hacia personas que lógicamente no son nuestras personas favoritas (nuestros enemigos), a quienes lógicamente, no nos nace el instinto de desearles buenas cosas.
Es decir, desde esta perspectiva, practicar el amor hacia el prójimo, como hacia el extranjero, en el mayor de los casos es una acción que Dios nos demanda para ejercer hacia nuestros enemigos, no necesariamente las personas con quienes compartimos, ya que de aquello no habría necesidad de enseñar.
​
Por si no fuera demasiado claro, otros pasajes de la Biblia enseñan lo siguiente:
Éxodo 23:4  Cuando encuentres errante el buey o el asno de tu enemigo, deberás devolvérselo. 23:5 Cuando veas el asno de tu enemigo echado debajo de su carga y se abstenga de levantarlo, debes,ciertamente, levantarlo con él.

Prov 24:17 Si tu enemigo cae, no te regocijes; Si tropieza, no se alegre tu corazón.

Prov 25:21 Si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer pan; Si tiene sed, dale de beber agua.
Estos pasajes claramente describen la actitud que Dios espera que tengamos hacia nuestros enemigos, que cabe enfatizar que Jesús parecía haber correctamente enseñado, con la diferencia que es la Torah que nos manda a obrar con amor hacia nuestros prójimos que pueden ser nuestros seres queridos, los extranjeros o los no tan queridos. Además debemos entender que nuestro trato al enemigo no lo exenta de un juicio por un crimen o cualquier otra ofensa que haya hecho, pues tanto como Yehovah es un Dios de amor, también lo es de justicia, y en la Torah Dios nos manda a obrar con amor hacia personas que nos hayan ofendido pero con justicia al impío. Es decir, el amor al enemigo no significa que si alguien te golpea tu le des la otra mejilla, como sería lógico, si alguien abusa a tu hija, no le das la otra o si roban tu vehículo no le pasas el otro, aquello no es amor de acuerdo a la Torah, porque la Biblia enseña que Dios castiga a quienes ama. Por lo tanto, el amor hacia el enemigo trata sobre no ejecutar el juicio con nuestras propias manos, no actuar con nuestro instinto animal destructivo. Es decir,  no hacer el mal hacia otras personas, incluso nuestros enemigos, así como tampoco queríamos o quisiéramos que ellos nos hubiesen tratado. Pero indefectiblemente cada persona debe pasar por su propio juicio. 
Un buen ejemplo del Nuevo Testamento de hecho es como Jesús enseña que deben orar por enemigos y debido a que no especifica cómo orar por el enemigo, si Jesús enseñaba conforme a las Escrituras Hebreas que en Mateo 5:17 dice que no vino a abrogar y que cualquiera que quitase una letra de ella sera destruida (Versión Hebrea Shem Tov), es muy posible que haya enseñado conforme a cómo la Biblia enseña que debemos orar por nuestros enemigos (Salmo 55, Salmo 59), Esta enseñanza cristiana en contexto del pensamiento del pueblo judío, que era el de Jesús, comprobaría que el amor hacia el enemigo y el deber de orar por ellos trata sobre no ejecutar el jucicio con nuestras manos, es decir frenar la violencia o la venganza, sino que debemos pedir a Dios que haya justicia hacia los impíos, que se Él, el que cobre venganza de los malhechores 

Conclusión:

Cómo el concepto del amor, el tratar al prójimo como a uno mismo y todo lo que aquello conlleva se infiltró en la historia universal es un historia que no creo que tenga una sola versión y tomaría más de un libro registrar.

Recuerdo haber estudiado en una clase de religiones del mundo en Estados Unidos sobre el origen del Budismo y cómo, según mi profesor en aquel entonces, relataba que el príncipe de India que dejo todo por hacer obras de caridad comenzó su travesía por el impacto que tuvo en él las enseñanzas de ética de la Biblia Hebrea, la Fe judía. Ahor abien sabemos que el Budismo, que fue un religión pagana que se difundió después de la muerte de este príncipe fue fundada sobre ocho principios que sin duda originan de la Biblia y hoy una gran parte de países asiaticos y ateos del mundo se benefician de estos principios de amor hacia el prójimo que fueron influenciados por la Palabra que Dios le reveló al pueblo de Israel.
 
También se nos dice en la Biblia que de todas las naciones acudían a escuchar la sabiduría del rey Salomón, el rey de Israel, aquel que escribió en proverbios sobre la bondadosa actitud que hay que tener hacia nuestros enemigos, como también de los severos juicios que ejercía para hacer cumplir la justicia, un evento y periodo que sin duda pudo haber influenciado la formación de muchas naciones de aquel entonces que fueron la cuna de las naciones modernas de nuestros tiempos.

Del Periodo del Segundo Templo, también aprendemos que el amor hacia el prójimo, basado en Levítico  19, se volvió la "regla de oro", el principio fundamental de la Fe judía junto con el amor hacia Yehováh en el Shem,a (Deut 6:4). Esta adrede y aceptada interpretación se podría deber a que éstos son los dos únicos mandamientos en la Torah que incluyen la palabra hebrea "ahava" (amor). El cuál se cree ser la fuerza fundamental y más fuerte de nuestra Fe.

Sabemos por la historia del pueblo de Israel que muchos padecieron por predicar este mensaje, la lamentable historia de Rav  Akiva cuenta que fue envuelto en un rollo de la Torah a un poste y quemado vivo por declarar el Shema Israel, donde se nos enseña a amar a Dios y obedecer sus mandamientos, que por defecto tratan sobre el amor hacia el prójimo.

A su vez, aunque el Nuevo Testamento justifica la muerte de Jesús por otros motivos teológicos, sabemos que también padeció muerte y enseño a las multitudes, el mensaje sobre la unicidad de Dios, y el amor hacia nuestros prójimos.

El islam tiene su propia historia, y aunque en ciertos casos parece ser una religión lejos de esta ideología, algunas de las enseñanzas del Coran, también reflejan el amor que expresamente cita haber aprendido de los judíos, tanto de la Torah, que reconoce ser una revelación legítima del Dios de la creación hacia los israelitas y de las enseñanzas que ellos consideraban de un profeta, Jesús. 

Finalmente, el cristianismo, que a pesar de todo el trayecto y desviaciones de esta religión, los guerras y persecuciones, en su momento incrustaron de alguna forma las enseñanzas de la Biblia Hebrea a sus sociedades y  las palabras mas famosas de Jesús sobre el amor al prójimo.

Pareciera que cualquiera sean nuestras teorías, creencias o conocimiento que tenemos de Dios y de su Palabra, Dios estuvo orquestrando todo este tiempo la historia de nuestra humanidad, desde que sacó a los israelitas junto con sus enemigos opresores de Egipto hasta nuestros propios días para que al menos tengamos ese principio fundamental de Dios registrado en la Torah.

"Ama a tu prójimo como a ti mismo"

Tal como se describe en Deuteronomio capítulo 4, el pueblo de Israel debía ser un testimonio, una luz para la humanidad, a fin de que las naciones aprecien la sabiduría que emanaría de ellos, y así procuren seguir a Yehovah y sus mandamientos. De esta forma creo que la Torah enseña que el amor al prójimo es un mandamiento universal, enseñando a los israelitas a ejecutar la bondad en sus comunidades y nación, con el objetivo de impactar el mundo, a fin de que todos los habitantes de la tierra logremos un futuro sin distinción entre etnias y libre de prejuicios, donde ejerzamos obras de justicia hacia los justos y misericordia hacia los que necesitan de nuestra ayuda.

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