Devar Torah Parasha Ki Tisa

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La porción de esta semana contiene una de las imágenes más épicas de la Torah, a pesar de los prodigios que Dios hizo a favor de Israel, ellos construyen un becerro de oro para adorarlo y Moisés, enojado por la conducta del pueblo, desciende y rompe las tablas de la Ley, escritas por el dedo de YHVH. 

Después de esta escena, no sé qué es más grave, ¿La idolatría del pueblo o las emociones impulsivas que de vez en cuando afloraban en Moisés destruyendo ni más ni menos que la única pieza tangible que sería un testimonio de Dios?

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A pesar de todo el drama, lo más impactante para mi en esta narrativa es que cuando Moisés implora por el perdón y Dios accede a su petición, Moisés confundido le pide a Dios que quiere conocerlo. ¿Qué es lo que pretendía Moisés? o ¿Qué es lo que quería conocer? no lo sabemos, para mí esta es una de las historias más confusas de la Biblia, pero me parece injustificable que la persona que podríamos saber que fue más cercana a Dios, la que escuchó su voz y vio más de cerca el fuego que salía del Monte Sinaí, la que fue usada para traer los prodigios de Dios como hacer partir un mar en frente de sus ojos y la que ya había recibido numerosas instrucciones y mandamientos de parte de Dios como pudo Moisés decir: "Dios quiero conocerte"

 

Esta historia nos enseña que independiente de todo el conocimiento de Torah que podamos tener, incluso si fuéramos los mismos receptores, como lo fue Moisés, hay mucho más de Dios que desconocemos y podemos pasar por alto.

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Por suerte para nosotros, Dios responde positivamente a esta plegaria y accede a mostrarle a Moisés quien El era:

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Exódo 34:6 - ¡Yehováh! es ¡Yehováh! (El) Dios fuerte, misericordioso(Rajum) y piadoso (V´janun); tardo para la ira (Erej apayim), y grande en misericordia (Rav jesed) y verdad (v´emet); 7 que guarda misericordia (motzer jesed) a millares, que perdona la iniquidad (nose avon), la rebelión (v´fesha) y el pecado (v´jatat), y que de ningún modo tendrá por inocente al malvado (Naqeh lo Y´naQeh); que visita la iniquidad de los padres (Poked avon avot) sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generación.

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La Torah a veces puede parecer compleja, como Moisés, independiente de cuando podamos conocer e interactuar con las Escrituras, podemos terminar confundidos y ni saber quien o cómo es Dios, o si existe. Estas palabras no obstante nos recuerdan la esencia de Dios, conocido también como los "13 Atributos de Dios".

 

En sumatoria estos atributos nos enseñan que YHVH es por sobre todo, un Dios lleno de compasión, misericordia, tardo para la ira, que guarda misericordia a millares, perdona los errores humanos, las faltas e incluso la rebelión (de los que abrazan sus mandamientos) mientras no absuelve a alguien que no se arrepienta de sus malas obras.

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Si pudiéramos intentar imitar a Dios, acercarnos a su esencia y voluntad, a pesar de cuanto conozcamos la Biblia o no, o de cual sea nuestra opinión al respecto, aprendamos a mirar el mundo y a influenciar nuestra sociedad con la misma compasión, misericordia y comprensión con la que Dios trata con nosotros cada día.